
Paulina Bucheli P.
Art Therapist & Phycologist & Expressive Arts

Qué es un trastorno de alimentación?
Los trastornos de alimentación son condiciones de salud mental que afectan negativamente la relación de una persona con la comida (alimentación) y su cuerpo.
Estos desórdenes, comunmente conocidos como anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y el trastorno por atracón, pueden tener graves consecuencias físicas y psicológicas.
La más conocida o expuesta públicamente es la denominada anorexia nerviosa, que se caracteriza al convertirse en una preocupación (obsesión) extrema por el peso corporal, que en la mayoría de veces se acompaña de una gran distorsión de la imagen corporal, esto es que mentalmente una persona se ve a si misma con un gran sobre peso, cuando en la realidad tiene un aspecto extremadamente delgado o hasta calvarérico.
Lo difícil de detectar este tipo de enfermedades es que familiares directos o amigos del paciente no entienden acerca de esta distorsión, y lo simplifican con un simple problema comportacional o mala conducta, agravando el problema al pasar de los meses y hasta años.
Consecuencias de un trastorno alimenticio?
Las personas con anorexia pueden restringir severamente la ingesta de alimentos, lo que lleva a una pérdida de peso significativa y un temor intenso a aumentar de peso.
Esto puede provocar una malnutrición grave y poner en peligro la vida.
La bulimia nerviosa implica episodios recurrentes de atracones de comida seguidos de comportamientos compensatorios, como vómitos autoinducidos o el uso excesivo de laxantes. Las personas con bulimia suelen experimentar sentimientos de falta de control durante los atracones y pueden tener preocupación excesiva por la forma y el peso corporal.
El trastorno por atracón se caracteriza por episodios recurrentes de ingestas excesivas de alimentos, en los que la persona pierde el control sobre su alimentación. A diferencia de la bulimia, no se presentan comportamientos compensatorios, lo que puede llevar a un aumento significativo de peso y problemas de salud asociados.
Estos trastornos de alimentación no solo afectan la salud física, sino también la salud mental y emocional de quienes los padecen.
Importacia de entender la enfermedad.
Las personas con desórdenes de alimentación pueden experimentar sentimientos de culpa, vergüenza y baja autoestima. Además, pueden desarrollar problemas de ansiedad, depresión y aislamiento social.
Es fundamental buscar ayuda profesional si se sospecha de un trastorno de alimentación.
Los tratamientos adecuados, como la terapia cognitivo-conductual y la terapia familiar, pueden ayudar a abordar las causas subyacentes de estos desórdenes y promover una relación saludable con la alimentación y el cuerpo.
El apoyo de un equipo multidisciplinario, que incluya médicos, nutricionistas y psicólogos especializados en trastornos de alimentación, es crucial para una recuperación exitosa.
Según la experiencia profesional hay dos factores que afectan el tratamiento de un proceso de recuperación:
- Negación por parte del paciente
- Gran desconociento de la gravedad por parte de los padres acerca de la enfermadad
Es importante crear conciencia sobre estos desórdenes, eliminar el estigma asociado y promover el acceso a la ayuda y el tratamiento adecuados. La recuperación es posible y brindar apoyo y comprensión a quienes lo necesitan puede marcar una gran diferencia en su camino hacia la salud y el bienestar.
Consecuencias de los trastornos de alimentación.
Los trastornos alimenticios pueden tener consecuencias graves para la salud física y emocional de quienes los padecen.
La malnutrición es una de las principales consecuencias, ya sea por una ingesta insuficiente o desequilibrada de nutrientes. Esto puede llevar a debilidad muscular, fatiga, problemas de digestión, trastornos del sueño y problemas de concentración.
Además, los desórdenes de alimentación pueden causar daño en órganos vitales como el corazón, los riñones y el sistema gastrointestinal.
En algunos casos, incluso, han terminado con la MUERTE del paciente, a causa de un infarto fulminante debido a la malnutrición.
A nivel emocional, estas condiciones pueden generar ansiedad, depresión, aislamiento social y disminución de la autoestima. Es crucial buscar ayuda profesional para tratar estos trastornos y prevenir complicaciones a largo plazo.
Un tratorno alimenticio es una enfermedad GRAVE, que tratado por personal poco profesional o, carente de experiencia, podría deribar en consecias irreversibles en la vida de un paciente.