¿Qué es la Terapia y la Mediación Familiar?

La Terapia y la Mediación Familiar abordan dificultades que afectan a la dinámica familiar. A diferencia de otros enfoques, esta intervención se dirige a la familia como un sistema, no solo al individuo.

Las relaciones familiares son cambiantes; cualquier transformación en un miembro o su entorno puede requerir ajustes en todo el grupo.

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¿Cuándo acudir a un terapeuta o mediador familiar?

Se recomienda buscar ayuda cuando ocurre un cambio importante (como un nacimiento o una separación) y la familia tiene dificultades para adaptarse, o cuando el funcionamiento general se vuelve negativo o genera malestar.

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Motivos frecuentes de consulta

Las familias suelen acudir en momentos de crisis o cambio, como:

Nacimientos, separaciones o divorcios

Nuevas parejas y familias reconstituidas

Adopciones o procesos de reproducción asistida

Conflictos entre hermanos, padres, hijos o familiares extendidos

Independencia de los hijos

Pérdida de un ser querido

Enfermedades que generan dependencia

Violencia o abuso familiar

Jubilación

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¿Cómo funciona la intervención familiar?

El psicólogo guía a la familia en su proceso de cambio, brindando herramientas y acompañamiento. Para que la terapia sea efectiva, es clave la participación activa de todos los implicados.

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En algunos casos, también se trabaja en conjunto con escuelas u otros profesionales para lograr mejores resultados.